A veces una ciudad, a veces un mundo entero.
Otras, seré aquella niña que corre o aquel zorro que te visita de noche. En ocasiones seré todo un gremio o una carrera de coches, quizá. De vez en cuando podré ser un animal mitológico desconocido por todos. O un caso sin resolver. Puede que sea tú ahora mismo o tal vez seas yo cuando acabes de leerme.
Pero por el momento puedes llamarme Virgudilla.
A cambio, intentaré que descubras quién soy, cada fin de semana.
De vez en cuando, lo descubrirás rápidamente, pero a veces tardaré algunos capítulos.
No te preocupes, no empezaré a ser otra hasta dejar de ser la que estás conociendo. No sería divertido.
Pero te lo advierto, en ocasiones los personajes que me forman toman vida propia y quizá hablen por si solos a lo largo de la semana, pero esto ya no depende de mi. Yo sólo puedo prometerte que de sábado a domingo tendrás una parte de mi para leer. Si nada lo impide, seré gratis, como deben ser los regalos.
¿Quién me escribe?
Mi autor se llama Jorfe. Y como verás más abajo suyo es el © de todo lo que aquí se publica.
Tal vez ya le conozcas, también es ilustrador. Pero si no tuviste oportunidad podrás descubrir como dibuja haciendo click sobre su nombre resaltado en amarillo.
¿Cómo nací?
Por casualidad.
Soy fruto de un juego, un divertimento, un error y un trabalenguas a la vez.
Mi nombre es la mezcla de otros dos: Virgulilla y Cedilla.
Dos palabras que muestran el origen de mi autor y también sus dos lenguas maternas.
Mi semblante es obra de Jorfe, que con la ayuda de Gabslabs convirtió su idea en realidad.
Mi razón de ser es sólo una: Divertir.
Divertir a mi autor, que mientras escribe su primera historia larga airea su mente escribiéndome.
Y también divertirte a ti, que tomaste un pedacito de tu tiempo para leerme, porque divertirse divirtiendo es más divertido. ¿No crees?
¿Qué espero de ti?
Que me leas y lo pases bien.
Que comentes y me difundas, si crees que debo ser conocida.
Y tal vez, sólo tal vez, que algún día me ayudes a
elegir hacia donde van mis aventuras.
¿Me leerás?
Espero que sí.
Virgudilla.